Evangelio según San Mateo 11,25-27.
Jesús dijo:
«Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños.
Sí, Padre, porque así lo has querido.
Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo sino el Padre, así como nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.»
Te alabo…
1. Te alabo: en tu vida también es necesario ser agradecido con dios, agradécele todo lo que te da y por sobretodo la vida en si. No dejes de dar gracias por vivir, por estar y por ser un hijo de Dios. Sé agradecido.
2. Los pequeños: son aquellos que aceptan la vida, su vida. Aquellos que asumen la obra de Dios en sus vidas, es el mismo Dios quien permite que el hombre descubra la vida y cuando más se mete uno en la vida más descubre uno su pequeñez.
3. Los sabios: podríamos tomarlo en tinte filosófico, al estilo de Sócrates, son aquellos que desean vivir en la verdad, tomando la verdad con lo clave de la vida y no como un argumento para llevar la vida hacia donde uno quiere.
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¡Que Dios te bendiga!
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