Evangelio según San Mateo 5,38-42.
Jesús, dijo a sus discípulos:
Ustedes han oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente.
Pero
yo les digo que no hagan frente al que les hace mal: al contrario, si
alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, preséntale también la
otra.
Al que quiere hacerte un juicio para quitarte la túnica, déjale también el manto;
y si te exige que lo acompañes un kilómetro, camina dos con él.
Da al que te pide, y no le vuelvas la espalda al que quiere pedirte algo prestado.
Dios se da.
1) Rencor: Cuando alguien te hizo doler por una actitud que tomó con vos o alguna palabra que te hirió y esto no lo trabajas, pasa a convertirse en bronca. Esa bronca lleva a una búsqueda de venganza y tu interior se empieza a enviciar. Ya tu vida se empieza a llenar de cosas que no te hacen bien, pero buscas tranquilizar tu bronca. Pensá si habita en vos la venganza ¿sos vengativo? o ¿fuiste vengativo? Es por ello que la clave es trabajar todo esto porque cuando te convertís en una persona vengativa, ya caes en un vicio que no es fácil salir.
2) La túnica: Esto implica dar, lo que implica dar es el diálogo; no dejes de buscar el diálogo ante aquellas personas que no son de tu agrado o que te lastimaron. Busca escuchar y digerir la situación, no decidas las cosas a las apuradas. Aprende a dar tu túnica (tiempo) y desde allí busca resolver y emitir un juicio, acordate que la cabeza es traicionera.
3) Caminar: En esta vida de quien menos espera, te deja una enseñanza, hoy vos seguro que tenés que acompañar y la clave es la generosidad. Porque el corazón generoso es un corazón bendecido. No tengas miedo de acompañar, hay veces que estamos cada uno en nuestro chat y no miramos la necesidad del otro. Capaz que al ver la necesidad del otro, te des cuenta que te ahogas en un vaso de agua.
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¡Dios te bendiga!. ¡Gracias!
