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Citas con La Biblia (III)

por Carlos L. Rodriguez Zía

En muchos países del mundo septiembre es el mes de La Biblia. Momento más que oportuno para dedicarle un tiempo a su lectura. Así que, lectores de Misioneros Digitales Católicos, tomen asiento, que a continuación los convidamos con unos pasajes de las Sagradas Escrituras.

El domingo 1º de septiembre, al final de la misa, el Padre Juan Daniel Martínez, párroco de mi parroquia Nuestra Señora del Valle (Córdoba, Argentina), comentó que está muy bien leer los documentos eclesiales o los libros que hablan acerca de la Palabra de Dios; pero que nada se compara con la experiencia de leer La Biblia. Hizo foco en una obviedad: si uno quiere saber lo que Dios tiene para decirle, hay que visitar las páginas  de las Sagradas Escrituras. En esta tercera entrega, los versículos elegidos nos proponen tener presente que nos pase los que nos pase, Dios siempre está a nuestro lado, diciéndonos: “No temas, yo estoy contigo”.

“Cuando los entreguen, no se preocupen de cómo van a hablar o qué van a decir: lo que deban decir se les dará a conocer en ese momento, porque no serán ustedes los que hablarán, sino que el Espíritu de su Padre hablará en ustedes”.

Mateo 10, 19-20.

“Una noche, el Señor dijo a Pablo en una visión: «No temas. Sigue predicando y no te calles. Yo estoy contigo. Nadie pondrá la mano sobre ti para dañarte, porque en esta ciudad hay un pueblo numeroso que me está reservado”.

Hechos de los Apóstoles 18, 9-10.

“Al ver esto, caí a sus pies, como muerto, pero él, tocándome con su mano derecha, me dijo: «No temas: yo soy el Primero y el Ultimo, el Viviente”.

Apocalipsis 1, 17.

“Yo estoy contigo: te protegeré dondequiera que vayas, y te haré volver a esta tierra. No te abandonaré hasta haber cumplido todo lo que te prometo».

Génesis 28, 15.

“El Señor respondió: «Yo mismo iré contigo y te daré el descanso».

Éxodo 33, 14.

“Me invocará, y yo le responderé. Estaré con él en el peligro, lo defenderé y lo glorificaré”.

Salmos 91, 15

“Descarguen en él todas sus inquietudes, ya que él se ocupa de ustedes”.

Primera Carta de San Pedro 5, 7.

Debo confesar que cuando leo en el Evangelio de Mateo, capítulo 27, versículo 46: “Hacia las tres de la tarde, Jesús exclamó en alta voz: «Elí, Elí, lemá sabactani», que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?», me siento aliviado. Pues pienso que si el mismísimo hijo de Dios se sintió abandonado por el Padre, bien puedo yo, un simple pecador, experimentar la sensación de que el Padre se ha olvidado de mí. Más cuando hay que atravesar momentos  duros. Pero al leer y meditar los pasajes que aquí se comparten, comprendo que ni a Jesús ni a mí el Padre nos abandona. Aunque seguro que Jesús no lo dudó ni un segundo, allí estaban al pie de la cruz su madre y el discípulo Juan. A mi lado, están mi esposa y mis hijas que me alientan a seguir adelante. Dios no se olvida de nosotros, nunca lo hizo. Como se dice en otros pasajes bíblicos, tiene contados cada uno de nuestros cabellos y nos lleva tatuados en las palmas de sus manos. Dios siempre está a mi lado y me inspira a la hora de hablar en los cursillos de preparación al bautismo que doy en  mi parroquia. Dios, día a día, está presente en esa persona que nos atiende bien en un negocio o  en ese médico que comprende nuestros miedos o nuestras ansiedades. Dios siempre va caminado a la par nuestra. Deseo que estos siete pasajes bíblicos –y todo lo que La Biblia dice- ayude a ver como se dibujan al lado nuestro las pisadas del Padre.

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1 comentario

Yolima Cardenas septiembre 16, 2019 - 7:18 pm

Gracias por tan bello mensaje???

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