Portada » Meditación del día 6 de diciembre

Meditación del día 6 de diciembre

por Pbro. Luis A. Zazano
Lucas-517-26

Evangelio según San Lucas 5, 17-26

Un día, mientras Jesús enseñaba, había entre los presentes algunos fariseos y doctores de la Ley, llegados de todas las regiones de Galilea, de Judea y de Jerusalén. La fuerza del Señor le daba poder para curar.
Llegaron entonces unas personas transportando a un paralítico sobre una camilla y buscaban el modo de entrar, para llevarlo ante Jesús.
Como no sabían por dónde introducirlo a causa de la multitud, subieron a la terraza y, desde el techo, lo bajaron con su camilla en medio de la concurrencia y lo pusieron delante de Jesús.
Al ver su fe, Jesús le dijo: «Hombre, tus pecados te son perdonados».
Los escribas y los fariseos comenzaron a preguntarse: «¿Quién es este que blasfema? ¿Quién puede perdonar los pecados, sino sólo Dios?».
Pero Jesús, conociendo sus pensamientos, les dijo: «¿Qué es lo que están pensando?
¿Qué es más fácil decir: ‘Tus pecados están perdonados’, o ‘Levántate y camina’?.
Para que ustedes sepan que el Hijo del hombre tiene sobre la tierra el poder de perdonar los pecados -dijo al paralítico- yo te lo mando, levántate, toma tu camilla y vuelve a tu casa».
Inmediatamente se levantó a la vista de todos, tomó su camilla y se fue a su casa alabando a Dios.
Todos quedaron llenos de asombro y glorificaban a Dios, diciendo con gran temor: «Hoy hemos visto cosas maravillosas»

La fe cura

1) El poder de curar: Hoy lleva a Dios tus heridas y tus dolores, aquellas cosas que sabes que ninguna medicina podrá sacarte del todo y ningún psiquiatra, solo la fuerza de Dios.

2) Paralítico: Es la figura que aquel que nada puede solo. Es aquel que tiene muy metido en sí la palabra «no puedo». Hoy hay muchos paralíticos en donde su vida está tomada por ser estáticos, no saben innovar. Son personas que no se animan a lo nuevo. Hoy no seas un paralítico, sé un caminante de la vida.

3) Los que lo llevan: Los cristianos somos aquellos que llevamos gente a Jesús. Llevamos personas que no saben cómo llegar porque en la vida se paralizaron. Los golpes de la vida le hicieron creer que no podían más. Hoy somos nosotros los que debemos llevar a otros, como alguna vez alguien nos llevó al encuentro de Jesús. Hoy, ¿vos llevas a alguien al encuentro de Jesús? ¿A quién?

Artículos relacionados

Deja un comentario