Todos los años en esta fecha, el altar monumental que acoge la cátedra de San Pedro permanece iluminado todo el día
El 22 de febrero se celebra oficialmente en la iglesia católica la fiesta de la cátedra de san Pedro.
La cátedra de san Pedro tiene un doble significado, en primer lugar, hace referencia a una silla, cátedra significa también asiento elevado, desde donde el maestro da lección a los discípulos. Pero no se honra una cátedra cualquiera, sino la cátedra Petri, donde se sentó san Pedro durante su administración como primer papa.
Los funcionarios del imperio romano se sentaban en sillas de este tipo cuando administraban justicia o cuando participaban de ceremonias oficiales. Con su origen en el imperio romano la tradición fue replicada en la iglesia católica romana y sobrevive hasta el día de hoy, de hecho, los obispos por ejemplo se sientan en una cátedra especial durante las ceremonias litúrgicas en su iglesia Catedral. La iglesia recibe este nombre por la silla.
El asiento significa la autoridad especial de un obispo sobre una determinada región y lo vincula con el sucesor de san Pedro, el papa.
En segundo lugar, la fiesta refiere a la autoridad espiritual concedida a san Pedro por Jesús. Hay una tradición que dice que el 22 de febrero marca el aniversario del día en que Jesús dijo a Pedro: “Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi iglesia y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella”. Mateo 16. ¿Cuál fue por tanto la Cátedra de San Pedro, elegido por Cristo como Roca, sobre la cual edificar la iglesia? Comenzó su ministerio en Jerusalén, la primera sede de la iglesia fue el cenáculo y es probable que en la misma sala donde también María, la madre de Jesús, oró juntamente con los discípulos. Luego Pedro se dirigió a Roma, centro del imperio, por eso la sede de Roma que había recibido el mayor honor, recogió también el oficio encomendado por Cristo a Pedro de estar al servicio de todas las iglesias particulares, para la edificación y la unidad de todo el pueblo de Dios. Así la sede de Roma, después de estas emigraciones de san Pedro, fue reconocida como la del sucesor de Pedro y la cátedra de su obispo representó la del apóstol encargado por Cristo de apacentar a todo su rebaño.
Celebrar la cátedra de san Pedro como hacemos nosotros significa, por consiguiente, atribuirle un fuerte significado espiritual y reconocer que es un signo privilegiado del amor de Dios, pastor bueno y eterno que quiere congregar a toda su iglesia y guiarla por el camino de la salvación. En definitiva, hoy celebramos esta silla o cátedra no por el objeto material en sí, sino por la persona que ocupó el asiento y la autoridad espiritual que recibió de Jesucristo.