Sagrado Corazón de Jesús, el camino de la compasión
Por la señal de la Santa Cruz+
de nuestros enemigos +
líbranos, Señor, Dios nuestro +
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo +
Oración inicial
Corazón de Jesús, acudo a ti porque eres mi refugio, mi esperanza, el remedio de todos mis males, el alivio de mis miserias, la reparación de todas mis faltas, la seguridad de todas mis peticiones, la fuente inagotable para mí, y para todos la luz, fuerza, constancia, paz y bendición. Amén.
Lectura bíblica del quinto día:
“Sean buenos y compasivos unos con otros” Efesios 4, 32
Jesús nos invita a vivir desde la compasión como actitud fundamental de vida. La compasión resume el amor que recibimos de Jesús y el que estamos llamados a dar a los demás. Es la síntesis de la dinámica amorosa en la que el Señor nos entrega el amor y la compasión, y nos invita a reproducirla con los demás.
Para asemejarnos a su Corazón compasivo, necesitamos transformar nuestro corazón, sintonizar con el Señor, escuchar la voz de Dios en nuestro interior, y aprender a mirar con sus ojos. Solamente así, habrá garantía de disponibilidad interior, para lo que el Espíritu Santo de Dios nos inspire.
Podemos sentir el latido del Corazón compasivo de Jesús al interesarse por nosotros en nuestra integridad. Como discípulos de Cristo, mostremos compasión a la humanidad, dando a conocer a Nuestro Señor, quien puede darnos su compasión, cambiar nuestra condición y con su luz, guiarnos por el camino de la vida.
- Pedir la gracia que se desea alcanzar del Sagrado Corazón de Jesús en esta novena.
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria)
Oración final
Rendido a tus pies, oh Jesús mío. Te pido humildemente amarte, servirte y serte fiel. Mira que soy pobre, oh buen Jesús, soy débil y necesito apoyarme en ti para no caer.
A las puertas de tu corazón, vengo, llamo y espero, oh Señor. Y del mío te hago decidida entrega. Tómalo y dame a cambio lo que me lleve a la eternidad, oh Señor.
Señor, quiero hacer tu voluntad y Tú me dices: “Ánimo, no temas, que soy yo”. Oh, Sagrado Corazón, se todo para mí, no busque yo consuelo más que en ti.
Se Tú mi refugio, quiero esconderme en tu corazón. Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío. Amén.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. +