¿Por qué la oración diaria es importante para los cristianos?
La respuesta es muy simple y sencilla, la oración es la mejor manera que tenemos los seguidores de Jesús de comunicarnos con Dios y demostrarle que estamos a su disposición y reconocemos que el es quien controla nuestras acciones, nuestros sentimientos, nuestra vida.
La oración de cada día es un acto de adoración y obediencia al Santísimo.
Por medio de la oración podemos día a día comunicarnos con Dios y contarle todo lo que nos pasa, lo que necesitamos, lo que queremos agradecer, compartiendo así nuestra vida con él.
Así mismo en las oraciones diarias podemos aprovechar para reflexionar con Dios sobre nuestros pecados y pedirle su ayuda para no volver a caer en la tentación.
Nuestra vida está en permanente cambio y somos nosotros los que disponemos de ella, pero al compartirla con Dios, todo cambia, se hace más sencillo. Somos afortunados quienes caminamos a su lado, podemos tener la certeza de que en todo lo que hagamos, él siempre va a estar ahí. Dándonos su apoyo y su bendición. Nosotros hemos sido llamados por él para que le ofrezcamos oraciones, nuestras dudas y preocupaciones que a veces no nos dejan dormir tranquilamente y también que compartamos las cosas buenas que nos suceden. Porque si solo fuera un Dios que está cuando las cosas van mal, no hemos aprendido nada de él.
Él es un Dios, que está siempre, pase lo que pase no nos abandona. A veces somos nosotros los que equivocamos el camino y lo abandonamos a él, pero ni así él se aleja de nosotros.
Jeremías 33:3 dice, «Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces». Dios nos está diciendo que pidamos por su intercesión y eso es lo que debemos hacer cada vez que tengamos esa necesidad, para estar cada día un poquito más cerca de él.
Hoy es tiempo de comenzar con tus oraciones diarias, en ellas incluye el pedido del perdón de tus pecados y el agradecimiento por esta relación personal que tienes con Jesucristo, agradécele por su bondad y misericordia.
Hoy es día de oración, debemos hacer de ella un hábito y nunca dejar de hacerlo.
¡Vamos que hasta el cielo no paramos!
Un pequeño aporte económico nos ayuda a
continuar con nuestra labor
Convíértete en Patrocinador de Misioneros Digitales
¡Gracias por tu generosidad!
¡Dios te bendiga!
[ecp code=»Matched_Content»]