Portada » «No es vuestra lucha, sino la de Dios»

«No es vuestra lucha, sino la de Dios»

por Pbro. Tomás Trigo
Dios te quiere

Escuchar aquí el episodio «No es vuestra lucha, sino la de Dios»

«No temáis… No es vuestra lucha, sino la de Dios» (Crónicas 20, 1-24).

En la lucha para realizar la misión que Dios nos ha encomendado, sucede a veces que actuamos como si contásemos únicamente con nuestras propias fuerzas. Y entonces no hacemos más que cosechar derrotas; y, ante las derrotas, nos invade el desánimo. 

«Señor, Tú nos preparas la paz. Todas nuestras obras las haces Tú por nosotros» (Is 26, 12).

Es preciso recordar que no somos nosotros los que llevamos sobre nuestros hombros la grave responsabilidad de ganar las batallas. «No temáis… No es vuestra lucha, sino la de Dios». 

Matteo Renzi, primer ministro italiano, contaba en una entrevista el consejo que le dio el párroco de su pueblo, que le conocía desde niño: «Mateo: Dios existe y no eres tú: así que relájate» (lo cita mi amigo José Brage, que fue un gran Buceador de Combate antes de ordenarse sacerdote, en su magnífico libro El equilibrio interior). 

Cuando actuamos como si la transformación del mundo solo dependiera de nosotros, es bueno que alguien nos diga: “No eres Dios, eres hijo de Dios. Confía en Él, descansa y relájate un poco”.

Es Dios, el Omnipotente, quien lleva el peso de la batalla. Nosotros somos solo (¡y nada menos!) sus colaboradores. Él confía en nosotros y nos concede el privilegio de que le echemos una mano.

Señor, no es mi lucha, sino la tuya. Eres Tú el que quiere cambiar el mundo. Y me pides que te ayude. No permitas que mi egocentrismo me lleve a creer que soy yo el héroe, el protagonista de este drama. (https://bobbergdesigns.com/) Yo estoy contigo, como un niño pequeño, abrazado a tus rodillas, y más que ayudarte te estorbo, pero Tú me dices: “Muy bien, vamos venciendo; lo estás haciendo muy bien, hijo, no tengas miedo. Somos un equipo. Tú para mí y yo para ti”. Y entonces huye el temor de mi pecho, y me doy del todo a mis hermanos.

Otras publicaciones de Tomás Trigo

Para comprar el libro: Dios te quiere y tú no lo sabes

Artículos relacionados

Deja un comentario