“Confía en María Auxiliadora y verás lo que son los milagros”
Por la señal de la Santa Cruz+
de nuestros enemigos +
líbranos, Señor, Dios nuestro +
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo +
Oración Inicial
Señor Misericordioso, tú que nos has dado a san Juan Bosco como padre y maestro de la juventud, concédenos el mismo celo apostólico que nos lleve a salvar las almas y servirte a ti. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén
Lectura bíblica del séptimo día:
“El poderoso ha hecho obras grandes por mí; su nombre es santo y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación” Lucas 1, 49-50
Don Bosco fue un gran impulsor de la devoción y el cariño a María Auxiliadora. Un acontecimiento fundamental fue la construcción de la Basílica María Auxiliadora en Turín (Italia). La historia de este templo es una sucesión de favores de la Virgen María. Don Bosco empezó la obra con solo tres monedas, pero fueron tantos los milagros que María Auxiliadora empezó a hacer a favor de sus devotos, que en solo cuatro años estuvo terminada la Basílica. El santo solía repetir: “cada ladrillo de este templo corresponde a un milagro de la Santísima Virgen”.
Desde aquel santuario comenzó a extenderse por el mundo la devoción a la Madre de Dios, bajo el título de “Auxiliadora”. San Juan Bosco decía: «Propagad la devoción a María Auxiliadora y verán lo que son los milagros”, y recomendaba repetir muchas veces esta pequeña oración: “María Auxiliadora, rogad por nosotros”.
- Pedir la gracia que se desea alcanzar de san Juan Bosco en esta novena.
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria)
Oración Final
Oh Jesús, que en medio de un siglo descreído y materialista, rodeaste a la persona de san Juan Bosco de tu divina luz, haciendo en él tan frecuente lo sobrenatural, concédenos por su mediación poder conocerte y hacer que otros te conozcan, para poder amarte y hacer que otros te amen, de la manera más perfecta que le sea posible a una pobre criatura. Amén
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. +