La llama gloriosa de tu Sagrado Corazón Señor
Por la señal de la Santa Cruz+
de nuestros enemigos +
líbranos, Señor, Dios nuestro +
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo +
Oración inicial
Corazón de Jesús, acudo a ti porque eres mi refugio, mi esperanza, el remedio de todos mis males, el alivio de mis miserias, la reparación de todas mis faltas, la seguridad de todas mis peticiones, la fuente inagotable para mí, y para todos la luz, fuerza, constancia, paz y bendición. Amén.
Lectura bíblica del octavo día:
“El fuego del amor es una llama que el mismo Dios ha encendido” Cantares 8, 6
El Sagrado Corazón de Jesús quiere tomar el corazón de cada persona: su ser, su alma, su cuerpo, su vida toda; e introducirla en ese horno ardiente de caridad, para hacerlo arder en el fuego de su amor, y convertirlo así en una llama viviente del amor divino.
Jesús nos entrega su Corazón Eucarístico, envuelto en las llamas de su amor, para que al tomar contacto el alma con la Eucaristía, el corazón humano se encienda en el fuego del amor de Dios, de modo que el alma quede toda encendida de la caridad divina.
- Pedir la gracia que se desea alcanzar del Sagrado Corazón de Jesús en esta novena.
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria)
Oración final
Rendido a tus pies, oh Jesús mío. Te pido humildemente amarte, servirte y serte fiel. Mira que soy pobre, oh buen Jesús, soy débil y necesito apoyarme en ti para no caer.
A las puertas de tu corazón, vengo, llamo y espero, oh Señor. Y del mío te hago decidida entrega. Tómalo y dame a cambio lo que me lleve a la eternidad, oh Señor.
Señor, quiero hacer tu voluntad y Tú me dices: “Ánimo, no temas, que soy yo”. Oh, Sagrado Corazón, se todo para mí, no busque yo consuelo más que en ti.
Se Tú mi refugio, quiero esconderme en tu corazón. Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío. Amén.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. +