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«Me emocioné hasta las lágrimas»

por Ayrton Lino
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En esta oportunidad es desde Bolivia que nos llega este testimonio que cuenta la emoción de volver a celebrar la misa de cuerpo presente. Emoción que puede hacer brotar lágrimas de felicidad.

¿Quién iba imaginar que este año ocurriría algo que pusiera en stop al mundo entero al extremo de tener que cerrar inclusive las iglesias? Nadie. La tristeza quiso apropiarse de mí: pero gracias a las transmisiones del padre Luis Zazano con su catequesis y misas diarias transmitidas por Facebook, pude aprender mucho y comulgar espiritualmente.

Tenía algo de nostalgia porque durante este tiempo de cierre me tocó realizar la limpieza respectiva en mi capilla donde presto servicio. Ver el templo completamente vacío era un fuerte golpe. Cuando tuvimos que celebrar nuestra festividad de Sagrado Corazón de Jesús, la que vivimos de manera virtual, para darle calor a esa pena, para llenar ese “vacío”, colocamos fotos de muchos integrantes de nuestra comunidad.

Misa en Bolivia

Y como los tiempos de Dios son perfectos, entendí que pronto llegaría el día donde todos nos volveríamos a encontrar y así fue. Un domingo volvimos a tener misas presenciales, tomando todos los recaudos necesarios. Quizás no podíamos ver nuestras sonrisas debido al cubre boca, pero nuestra mirada reflejaba la gratitud de volvernos a encontrar.

Volver a comulgar fue como esa brisa por la mañana que trae paz. Me emocioné hasta las lágrimas porque se hizo honor a la palabra COMUN UNION con Jesús.

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2 comentarios

Bernhard Gregor Werth Wallmeier agosto 30, 2020 - 10:19 am

Dios les bendiga y fortalezca en este dia junto al señor y la cominidad

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Geovanny Pérez agosto 30, 2020 - 12:02 pm

También doy gracias a Dios por el P. Luis que ha sido el eje central en mi vida y la de mi hermana y de muchísimas personas en estos momentos de pandemia, donde estuvimos encerrados tanto tiempo pero él estuvo transmitiendo con sus catequesis, misas, webinar, retiros m, vigilias, rosarios, en fin, que más pedirle, gracias Señor por usted P. Luis, Dios me lo bendiga infinitamente, gracias Señor por reencontrarlo.

Abrieron las parroquias y cuando estuve allí por primera vez, me tiré arrodillada en el Santísimo y allí lloré largamente y dando gracias a Dios, no pude contener las lágrimas tampoco cuando fui a comulgar, se me hizo un nudo en la garganta, recibir a mi Jesús sacramentalmente después de recibirlo tantas veces espiritualmente, que emoción tan enorme. Ver también a mis amigos, hermanos de comunidades después de tres meses, fue increíble. Quería abrazarlos y sin poder solo Bosnia hacíamos señas con los brazos, ofreciéndoles abrazos y besos desde el fondo de mi corazón.

No puedo ir con frecuencia a misa porque tengo mi sistema inmunológico comprometido por la quimioterapia que recibí hace casi un año donde posteriormente fui operada de cáncer de seno, pero para la gloria de Dios estoy sana, sirviéndole al Señor con la fundación de la parroquia a la que pertenezco y soy tesorera, de dar leche a niños desde que nacen hasta los 2 años de familias de muy escasos recursos, (Fundacion una Gota de leche). Les damos leche con la colaboración de personas muy buenas y generosas que nos donan lo poco o mucho que puedan tener, gracias Señor. Estamos llegando al ras últimamente por motivos de personas que han perdido sus trabajos y no pueden cooperar pero el señor provee siempre, gracias Señor:

Como dijo el P.Luis en su homilia y en sus audios no hay excusas que valgan para dejar de ir a recibir a Jesús sacramentalmente.

Gracias Dios mío por todo lo que has permitido porque un propósito tienes para con nosotros, solo le pedimos que nos lo revele para seguir sirviéndolo a través del prójimo.

Muchas bendiciones, desde República Dominicana, les agradece eternamente,

Alba Geovanny Pérez de los Santos

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